La verdad es que podés aprender a revisarte, a mirarte y escuchar tu cuerpo, así que te respondo las preguntas que puedan surgirte a la hora de hacerte auto chequeos ginecológicos.
¿Es posible hacer un auto chequeo ginecológico?
Esto te va a proporcionar las señales de cuando haya alguna anormalidad para ir a consulta. De todas formas, no sustituye el chequeo presencial que se recomienda hacer al menos una vez al año. Hay cosas del examen físico que no vas a poder realizar sola, ni la interpretación de los estudios, en la que “Google” no es experto ni nos ayuda.
Lo que te quiero brindar a través de esta nota es una idea de qué cosas tienen que llamarte la atención para consultar a la brevedad.
¿Sirve el autoexamen mamario?
Está bueno que aprendamos a revisar nuestras mamas de manera periódica para poder detectar anormalidades palpables. Este examen es ideal hacerlo luego de la menstruación, si es que todavía menstruás, para poder ir palpando sector por sector la mama en forma circular y radial, más superficial y más profundo para conocer sus formas y texturas y reconocer algún cambió. Las mamas, sobre todo en la gente más joven, no son lisas y tienen como pequeños resaltos que son normales. Si te conocés y aparece algún nódulo o bulto nuevo, vas a poder notarlo.
Si bien la estrategia del autoexamen mamario está súper difundida y es recomendable, no podemos pretender que sea un método válido para la detección del cáncer de mama. ¿Por qué? Lo que nosotros queremos lograr es detectar lesiones tan pequeñas que no sean palpables. Cuanto más pequeña sea la lesión econtrada, mayor serpa el porcentaje de curación de la paciente. De allí que es importante hacer la mamografía anual, muchas veces sumada a la ecografía para aumentar la posibilidad de detección de lesiones muy pequeñas.
En conclusión: está muy bueno revisarse y concurrir si notás alguna anormalidad o bulto, pero aunque no notes nada, todos los años debés realizar un examen físico y una mamografía. La Sociedad Argentina de Mastología recomienda realizar una de base a los 35 años y luego a partir de los 40 de manera anual. Si tenés antecedentes familiares, es probable que necesites hacer tus controles antes de ese tiempo.
¿Qué otras cosas tienen que llamarte la atención de las mamas?
Si presentás pérdida de líquido por el pezón, especialmente si tiene restos de sangre, si el pezón se está yendo para dentro y antes no era así, o si notás en la piel alguna irregularidad o zonas más hundidas que no tenías. También si notás en la zona de la piel de la mama áreas rojas o aumento de temperatura. No olvides que muchas veces las lesiones malignas no producen ningún tipo de síntoma o dolor, por eso tenemos que ir a buscarlas con los estudios.
¿Qué pasa con los genitales?
Los genitales femeninos tienen en contra que están un poco más escondidos que los del hombre. La mayoría de mujeres no estamos acostumbradas a mirarnos, pero es muy bueno que puedas hacerlo ayudada por un espejo y buena iluminación, o puede ser a través de fotos del celu (¡a borrarlas después!).
Así conocés cómo es tu anatomía, y vas a encontrar tu genitalidad normal, con tantas formas de labios, tamaños y colores como personas con vulva hay en el mundo. También permitirá que puedas notar algún cambio: ampollas, lesiones como verrugas, lunares que cambian de forma o de tamaño, etc. y poder consultar a tiempo. Estar atentas a la presencia de flujo vaginal anormal: aquel que sea verde, que irrite, que moleste, o que tenga olor desagradable. El flujo vaginal normal es habitualmente blanco, levemente amarillento o transparente por momentos y no debe generar picazón ni ardor.
Sin embargo, para la prevención del cáncer de cuello de útero necesitamos hacer el Pap. La gran mayoría de lesiones no nos avisan, no dan síntomas, y por eso es importante concurrir al control periódico. Es cierto que en algunos lugares del mundo la mujer puede “autotomar” una prueba de HPV con una muestra del flujo y, si da positivo, la convocan para un Pap, pero es muy infrecuente.
En conclusión, es excelente poder conocerse revisarse y saber cómo tiene que comportarse nuestro organismo. Ante la mínima duda consultar un profesional.
No te olvides, sobre todo si te dejaste estar por la pandemia, de concurrir para poder hacer un examen físico profesional y los estudios para la detección precoz de los cánceres más frecuentes en la mujer. Así, como trabajar en la prevención de otras cuestiones relacionadas a nuestra salud sexual y reproductiva.
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